Álvaro Rico es Secretario General del IEBEmpezamos un año más el curso académico, sin quitar los ojos en las noticias macroeconómicas que, tanto del exterior como desde dentro de nuestro país, nos llegan a diario. Noticias que, en la mayoría de los casos, no alumbran demasiado a nuestro ánimo, sino que más bien nos hacen pensar si vale la pena tanto esfuerzo.Eso mismo, esfuerzo, es lo que le pido a mis alumnos al principio de curso. Que vean en este curso -que arrancamos hoy -una carrera de fondo, en el que el esfuerzo de muchos días, semanas y meses, es la mejor forma de contribuir a esta situación de inestabilidad y reequilibrio de nuestro sistema.Las carreras de final de año, tanto en los estudios como en las decisiones directivas, suelen traer más sangre, sudor y lágrimas que buenos resultados, por lo que debemos aprender y sacar conclusiones de lo que se ha hecho en España (y en gran parte del mundo “desarrollado”) durante años y décadas. La “dirección –y el estudio- por espasmos” no funciona.Nos hemos llenado de grasa, mala grasa en algunos casos, durante mucho tiempo, haciendo perder de vista lo importante, y poniéndolo en peligro: el hueso. Hemos cometido excesos, sin darnos cuenta de las repercusiones que podían tener nuestros actos en el largo plazo y con todos los escenarios posibles. Los “stress tests” no se adecuaban a la realidad y seguíamos metiendo grasa… La grasa engorda, pero no mantiene una estructura; el hueso, sí.Veamos en nuestra formación el mejor ejercicio: prepararnos para una carrera de fondo que evite tener grasas –de más- en nuestro organismo, en nuestro entorno y, por ende, en nuestra sociedad. Y así, poco a poco, vayamos construyendo un futuro más fuerte, más competitivo y mejor, mientras otros, los que gobiernan, intentan minimizar los excesos del pasado.Como leía hace unos días, “es más difícil librarse de las calorías de un exceso que evitar caer en él y cometerlo”. Centrémonos en lo importante, y evitemos mayores esfuerzos en el futuro: seamos constantes y constructivos. Que sea un año más, pero diferente…
Un comentario de “Un año más, pero diferente”
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Enhorabuena por la reflexión en voz alta, me parece acertada y muy oportuna para los tiempos que corren