Evolución del mercado de CoCos

Por Carlos Fernández, profesor del IEB.

El mercado de CoCos ha crecido significativamente desde su aparición hace aproximadamente siete años. Se considera que la primera emisión de un instrumento de capital contingente bajo este formato fue la realizada por Lloyds Bank en el año 2009. Desde entonces, y hasta cierre de 2016, se han emitido unos 438.000 millones de dólares en este tipo de instrumentos.

Al tratarse de instrumentos complejos, la evolución de las emisiones resultó ser lenta al principio, de tal forma que podemos establecer una clara separación entre dos períodos. Un período inicial entre los años 2010 y 2013, en el que las emisiones promediaron alrededor de los 13,000 millones de dólares anuales. Este período formativo, sirvió para que se empezasen a plantear los distintos mecanismos de absorción y triggers de la conversión. Además, resultaron clave las aclaraciones que poco a poco se fueron haciendo sobre los distintos detalles asociados a la aplicación práctica de los mecanismos, casos particulares, etc. Tras esos primeros tres años largos de formación de mercado, en los que los volúmenes de emisión fueron crecientes cada año, pasamos a lo que podríamos denominar un período de madurez del mercado. Así, según datos del Anuario sobre Renta Fija y Financiación Alternativa IEB – Axesor 2017, desde el año 2014 hasta el cierre de 2016, la emisión media de CoCos se situó a niveles de los 100.000 millones de dólares anuales, con un pico importante en el año 2014.

Después de un período de crecimiento continuo en los volúmenes emitidos hasta llegar al año 2014, los últimos dos años han ofrecido unos volúmenes más reducidos y decrecientes. Una de las explicaciones más plausibles para la reducción en los volúmenes de emisión es que la mayor parte de los bancos interesados en desarrollar activamente estos instrumentos han alcanzado niveles en los que se encuentran cómodos. En concreto, la emisión en 2016 cayó a 75.000 millones de dólares, un 25% inferior a la registrada en el año anterior. En 2015 había representado a su vez una disminución de un 43% respecto al pico de emisiones que se produjo en 2014.

Hasta ahora, la mayor parte de las emisiones han procedido de entidades bancarias, que han sido las primeras en aplicar estos instrumentos para la optimización del capital en balance. Sin embargo, recientemente se está mostrando un mayor interés por parte de las aseguradoras, que bajo el paraguas del Solvencia II podrían servir para dinamizar durante los próximos años el mercado de emisiones.

 

Tribuna publicada en Funds People