¿Se cumplirán las previsiones del crecimiento del 2,9% para este año? ¿Tendrá alguna influencia la llegada del nuevo gobierno? Para analizar estas y otras cuestiones, Capital Radio entrevista a Aurelio García del Barrio, director del MBA con especialización en Finanzas del IEB.
¿En qué puede influir el cambio de gobierno y su política al crecimiento del PIB en nuestro país?
En principio, yo estimaba en nuestras previsiones económicas un crecimiento del PIB del 2,8% para este año y no creo que en principio vayan a producirse cambios drásticos en este sentido. No hay razones para cambiar esta estimación. Es cierto que hay una serie de aspectos en el horizonte con los que se enfrenta el gobierno de Pedro Sánchez. Aspectos como la reactivación del crecimiento del empleo; el encarecimiento del petróleo, aunque creo que el precio bajará hacia final de año; la guerra comercial abierta por Trump, que afectará a las exportaciones; vamos a ver cómo los estímulos del BCE posiblemente finalicen este año; y más que probablemente una subida de tipos para el segundo semestre de 2019. Todo esto va a afectar la política económica del Gobierno.
No veo razones para cambiar las estimaciones de crecimiento, pero si hay un aspecto sobre lo que ha planteado Pedro Sánchez en el Congreso, que es el incremento del gasto público. No es salvaje -estamos hablando de 2.500 millones de mayor libertad de financiación para las Comunidades Autónomas- pero el mensaje de un mayor gasto por un lado y por otro mayores impuestos ante la necesidad adicional de financiarlo no es el mejor mensaje que se puede mandar.
Ha hablado del mayor endeudamiento que se va a permitir a las Comunidades Autónomas, antes tenían que cerrar con el déficit en el 0,1%, ahora se les permite un 0,3%, Pero son 2.400 millones que en realidad no salen de ningún sitio. El Gobierno ha negociado con Bruselas si se da un margen del 5,5% de déficit, de esos 5.500 millones lo que ocurre es que las CCAA se comerían la mitad…
Más que los 2.500 millones en sí -si además dividimos 2.500 millones de euros de margen fiscal entre las CCAA, lo que toca a cada una no es un importe significativo-, la cuestión es el mensaje que se está enviando. Creo que en los últimos años ha dado sus frutos la política de apretarnos el cinturón y creo que todavía esas medidas estructurales deberían mantenerse un tiempo más. Hay que ser muy cuidadoso en materia de déficit y no tanto por el déficit per se, sino por la deuda. Con la deuda sí podría surgir un problema y no solo para la economía española, sino para todas las economías del mundo.
Siguiendo con las medidas del Gobierno, se ha hablado de imponer un impuesto de sociedades de tipo efectivo del 15% para las grandes compañías, cifran en grandes compañías las que facturan más de 8 millones de euros al año ¿Esto son grandes compañías?
No. No podemos decir que en esta lista estén todas las pymes del país, pero hay muchísimas compañías que están facturando más de 8 millones de euros. Cuando hablamos de grandes compañías no podemos pensar solo en las cotizadas, pero hay muchísimas empresas con un volumen de negocio superior a los ocho millones de euros. También es interesante mencionar la amnistía fiscal y los impuestos a la banca y las empresas tecnológicas.
Pero no se concreta. Respecto a la amnistía fiscal es cierto que se han prohibido que hagan más en adelante, pero los dos impuestos hay mucho ruido, sin llegar a concretar…
Creo que son medidas políticas, sobre todo en el caso de la banca. Se dice que como se les ha ayudado, ahora deben contribuir a financiar las pensiones. Creo que las pensiones es un problema lo suficientemente profundo como para tratarlo buscando una solución de calado y no con parches temporales. No creo que sectores en concretos deban pagar más que las demás. Con este tipo de medidas se puede conseguir que algunas empresas directamente se marchen del país. Me parece que son medidas políticas.
Decía antes que deberíamos ir reduciendo deuda ¿Por qué es clave? Porque, a riesgo de decir una barbaridad, mirando históricamente este tipo de datos, la deuda nunca se paga…
Exactamente. La deuda nunca se paga y aún diría más, la deuda del mundo es impagable. Cuando hablamos de que un país tiene un nivel de deuda del 100%, quiere decir que si la tuviéramos que pagar mañana en su totalidad tendríamos que estar con todo lo que hicimos hace un año dedicarlo al pago de la deuda, no al servicio de la deuda, solo al pago del principal, con el agravante de que no podríamos pagar ni funcionarios, ni pensiones, ni sanidad… ningún servicio público.
Escribí un artículo hace ya un tiempo en el que comentaba que la deuda por PIB mundial es del 286% del PIB, aquí hay una disparidad de países muy importante, pero en su conjunto un 286% del PIB mundial. Eso es impagable. Pero lo que debemos intentar evitar es que se genere una burbuja de deuda. China ya estamos viendo cómo está sufriendo por ese motivo concreto. Cuanto más ajustemos el gasto tendremos que financiar menos, emitir menos deuda y pagarla más barata, porque en los últimos años los tipos de interés han estado bajos, pero gradualmente los tipos van a subir y vamos a pagar la deuda más cara.
¿Hasta qué punto importa que se pague o no esta deuda? Sé que digo una barbaridad, pero si no se pagase, lo peor que podría pasar es que se generaría una crisis basada en el impago de la deuda.
Si el impago fuera muy importante, se podría llegar a colapsar la economía mundial. Cuando se produce un impago, alguien deja de cobrar. Ahí está el problema de la situación. Durante la crisis griega surgieron voces pidiendo que se condonara toda la deuda, pero los acreedores se negaron. Condonar la deuda no es tan sencillo como firmar y desaparece el problema, hablamos de Gobiernos, fondos de pensiones, banca privada que pierden dinero.
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