José María Revello es Director del Master en Corporate Finance y Banca de Inversión del IEBSi hay tres niveles en la función financiera en el mundo de la empresa: tesorería, finanzas básicas y finanzas corporativas, tiene que haber una formación acorde con cada uno de los niveles.Obviamente dependiendo del tamaño de la empresa estas tres funciones financieras pueden tener mayor o menor desarrollo y número de personas asignadas a ellas. Supongamos una empresa suficientemente grande, de tal manera que tenga departamentos específicos para cada cual.Así, en el departamento de tesorería, una vez formuladas las rutinas y procedimientos de trabajo (cuadro de tesorería, conciliación bancaria con la contabilidad, etc.) el trabajo será en gran medida administrativo y de gestión del día a día. No son necesarios por lo tanto grandes conocimientos, y el responsable del mismo puede necesitar como mucho una licenciatura o ingeniería.Las finanzas que tienen que ver con el ‘reporting’, diseño, confección y alimentación de los cuadros de mando, análisis de proyectos de inversión y selección del ‘pool bancario’ requieren una titulación superior (licenciatura o grado en ADE o ingeniería con conocimientos de gestión empresarial).Por último, las finanzas corporativas que marcan el eje directriz de la creación de valor para el accionista: estructuración financiera del balance, política retributiva al accionista, fusiones y adquisiciones (M&A) requieren conocimientos especializados que se afianzan con la experiencia pero que óptimamente deben adquirirse previamente en el mundo académico. Y estos conocimientos que tienen que ver con la valoración de empresas, los mercados de capitales, la financiación de proyectos y la modelización financiera, por citar algunos, sólo se adquieren en escuelas de negocios o en universidades con cursos tipo ‘master’ o doctorados.
Un comentario de “La formación que acompaña a las finanzas”
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Como no podía ser menos, totalmente de acuerdo con las consideraciones del profesor José María Revello.