Javier Niederleytner es profesor del IEBHoy 31 de enero vence el límite impuesto por la CNMV para la prohibición de tomar posiciones cortas sobre determinados valores. Tomar posiciones cortas consiste, básicamente, en operar a la baja, es decir, obtener réditos de nuestra inversión cuando las cotizaciones caen. La operativa a la baja para mí es muy positiva, porque autoregula muy bien el mercado; el problema es que esta operativa se ha utilizado de manera que se podría considerar muy próxima a lo que se conoce como información privilegiada.Me explico. Si yo pido prestado un volumen importante de acciones, es porque voy a venderlas en el mercado con la intención de ‘tirar’ la cotización, es decir, conozco de alguna manera el comportamiento futuro de las cotizaciones.En mi opinión, se deberían permitir de nuevo las posiciones cortas, aunque es importante que continúe vigente la obligación de comunicar toda operación de préstamo de acciones de cuantías significativas. El mercado bursátil baja hoy fuertemente; yo creo que la CNMV levantará el veto a las posiciones cortas. No nos olvidemos que tomó dicha decisión en base a circunstancias excepcionales, y esas circunstancias excepcionales ya han desaparecido.
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